Metformina contra el envejecimiento
Definiendo el envejecimiento
Desde un punto de vista biológico, el envejecimiento es el resultado de la acumulación de una gran variedad de daños moleculares y celulares a lo largo del tiempo, lo que lleva a un descenso gradual de las capacidades físicas y mentales, a un mayor riesgo de enfermedad y, en última instancia, a la muerte. Estos cambios no son lineales ni uniformes, y su vinculación con la edad de una persona en años es más bien relativa.
En todo el mundo, las personas viven más tiempo que antes. Hoy la mayor parte de la población tiene una esperanza de vida igual o superior a los 60 años. Todos los países del mundo están experimentando un incremento tanto de la cantidad como de la proporción de personas mayores en la población.
En 2030, una de cada seis personas en el mundo tendrá 60 años o más según la OMS. En ese momento, el grupo de población de 60 años o más habrá subido de 1000 millones en 2020 a 1400 millones. En 2050, la población mundial de personas de 60 años o más se habrá duplicado (2100 millones). Se prevé que el número de personas de 80 años o más se triplique entre 2020 y 2050, hasta alcanzar los 426 millones.
Datos y cifras de la OMS:
- Entre 2015 y 2050, el porcentaje de los habitantes del planeta mayores de 60 años casi se duplicará, pasando del 12% al 22%.
- En 2020, el número de personas de 60 años o más superó al de niños menores de cinco años.
- En 2050, el 80% de las personas mayores vivirá en países de ingresos bajos y medianos.
- El ritmo de envejecimiento de la población es mucho más rápido que en el pasado.
- Todos los países se enfrentan a retos importantes para garantizar que sus sistemas de salud y de asistencia social estén preparados para afrontar ese cambio demográfico.
¿Qué es la Metformina?
La metformina es un medicamento perteneciente a la familia de las biguanidas, el cual es capaz de reducir la cantidad de glucosa (“azúcar”) que produce el hígado lo que a su vez disminuye la cantidad de glucosa que absorbe el cuerpo e incrementa el efecto de la insulina en el cuerpo. Actualmente representa al antidiabético oral recetado con mayor frecuencia, prescrita a alrededor de 150 millones de personas y siendo recomendada por la Asociación Americana de Diabetes y la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes, debido a su habilidad para disminuir la glucosa en sangre en una forma efectiva y segura. [1]
[1] Castro-Martínez MG, Castillo-Anaya V, OchoaAguilar A, Godínez-Gutiérrez SA. La metformina y sus aplicaciones actuales en la clínica. Med Int Méx 2014;30:562-574.
En 1995 reconocen que es una molécula segura y efectiva, se introduce en ese momento en Estados Unidos. Actualmente sigue siendo el fármaco de primera línea para la diabetes.
Recientemente, numerosos estudios que utilizan diferentes líneas celulares y organismos han demostrado que la Metformina tiene un gran potencial para retrasar el envejecimiento y evitar las enfermedades relacionadas con el envejecimiento, al dirigirse a moléculas clave, relacionadas con el envejecimiento (2).
A nivel de usuario común con resistencia a la insulina, síndrome de ovario poliquístico, prediabetes o diabetes mellitus tipo 2 los beneficios se basan en los siguientes mecanismos: disminución de la producción hepática de glucosa, de su absorción a nivel intestinal y aumento de la sensibilidad a la insulina en diferentes tejidos (a efectos prácticos, utilización de la glucosa).
Beneficios de la metformina
La metformina es ampliamente utilizada por sus diversos beneficios, aunque su uso más destacado es el de antihiperglucemiante. No obstante, debido a su perfil de seguridad conocido y su uso a largo plazo, la metformina se está convirtiendo en una opción prometedora para el tratamiento de diversas enfermedades.
- Retraso del envejecimiento
- Reduce riesgo de mortalidad relacionada con COVID-19.
- Se propone como un medicamento con propiedades antienvejecimiento y de cicatrización de heridas.
- Efecto potencial de neuroprotección y potenciamiento cognitivo.
- Disminuye el riesgo de padecer demencia y derrame cerebral.
- Posee propiedades antitumorales y anticancerígenas. La metformina inhibe el crecimiento, supervivencia y metástasis de diferentes tipos de células tumorales (incluyendo las del hígado, huesos, páncreas, endometrio, colon, riñón, cáncer y mamá).
- Se ha visto que su uso disminuye la incidencia de enfermedad cardiovascular en pacientes con diabetes (al mejorar los niveles de estrés oxidativo endotelial y atenuar la inflamación inducida por la hiperglicemia).
- Gracias a sus diferentes roles protectores, la metformina podría ser una buena elección para la intervención de enfermedades relacionadas con la edad en personas con o sin diabetes.
- Se sugiere que la metformina tiene un efecto terapéutico y protector en el desarrollo y progreso de la degeneración macular relacionada con la edad.
- La metformina es eficaz para reducir el peso corporal de pacientes con obesidad.
- Uso potencial para el tratamiento de patologías dermatológicas (dermatosis, melasma, envejecimiento cutáneo, acné, cicatrización).
- Reduce la hiperinsulinemia y andrógenos en circulación, incrementa la función ovárica y mejora la ciclicidad menstrual en mujeres con síndrome de ovario policístico.
- Tiene un efecto protector en los huesos, especialmente en las primeras etapas de la artritis reumatoide.
Metformina contra el envejecimiento
La homeostasis metabólica es una parte esencial de la homeostasis celular y del organismo. Múltiples vías de señalización que detectan el estado energético y la disponibilidad de nutrientes de las células se comunican mediante el factor de crecimiento y las vías de señalización de la hormona del crecimiento para controlar la homeostasis metabólica en humanos.
Durante el envejecimiento las vías de detección de nutrientes están desreguladas, llevando a un deterioro gradual en la regulación de la homeostasis metabólica.
Varios estudios revelaron que la Metformina ejerce sus efectos antienvejecimiento al mejorar la detección de nutrientes desregulados, principalmente a través de la regulación de cuatro vías de señalización de detección de nutrientes más importantes, incluida la regulación a la baja del factor de crecimiento similar a la insulina 1 (IGF-1) y las vías de señalización mTORC1 y la regulación ascendente de las vías de señalización AMPK y SIRT1.
Unos investigadores revelaron que en bajas concentraciones de NAD+, la Metformina activaba directamente SIRT1 y mejoraba la señalización anabólica, favoreciendo así el envejecimiento saludable.
Las mitocondrias por su lado son orgánulos importantes que proporcionan energía y mantienen la homeostasis en las células. Las anomalías en la función mitocondrial causadas por diversos factores patológicos afectan el metabolismo celular y perjudican al funcionamiento del organismo y en definitiva a la salud.
La metformina regula al alza la biogénesis mitocondrial por la SIRT3 a través de la metilación H3K79 mediada por AMPK, y retrasa el envejecimiento (modelos experimentales).
Otros estudios recientes mostraron que la Metformina reducía la producción de ROS (especies reactivas del oxígeno) por el complejo mitocondrial I (NADH: ubiquinona oxidorreductasa) y mejoraba la disfunción mediada por el estrés oxidativo o la apoptosis celular.
Esta alteración lleva a una inflamación de bajo grado que perdura en el tiempo. La inflamación promueve cambios epigenéticos (es decir en la expresión de los genes), la pérdida de estabilidad de las proteínas y la disfunción de las células madre, y es un factor clave que conduce a enfermedades relacionadas con el envejecimiento. Además de regular los indicadores metabólicos, la metformina también disminuye el nivel de inflamación de bajo grado en sangre. El seguimiento clínico mostró que la Metformina sola reducía significativamente los niveles circulantes de citoquinas proinflamatorias y la mortalidad en pacientes diabéticos de edad avanzada.
La Metformina también parece regular la microbiota intestinal de forma beneficiosa.
Tras una importante revisión sistemática de 53 estudios, con una población total de más de 400000 personas, Campbell et al. concluyeron que, independientemente de su eficacia terapéutica como fármaco antidiabético, el uso de metformina da como resultado una reducción de la mortalidad por cualquier causa, incluido cáncer y enfermedad cardiovascular.2
(2) Campbell JM, Bellman SM, Stephenson MD, Lisy K. Metformin Reduces All-Cause Mortality and Diseases of Ageing Independent of Its Effect on Diabetes Control: A Systematic Review and Meta-Analysis. Ageing Res Rev (2017) 40:31–44. doi: 10.1016/j.arr.2017.08.003.
Para conocer más del tema lo invitamos a ver el webinar gratuito “Metformina: Uso en envejecimiento y en la prevención del cáncer” con el Dr. Jeffrey Zuckerman.